[vc_row][vc_column][vc_single_image image=”7143″ img_size=”full”][vc_column_text]
Aidnel Martínez es un Becado Kinesis que tiene clara su meta: utilizar la tecnología en beneficio de su país, los envejecientes y los más pequeños.
El futuro ingeniero en computadoras de la Universidad de Puerto Rico, recinto de Mayagüez, es oriundo de Dorado, y logró perseguir sus sueños gracias a la labor de la Fundación Kinesis preparándolo como estudiante bajo el programa Bright Stars.
“Kinesis me brindó unas herramientas únicas y especiales para el resto de mi vida. Al tener la oportunidad de poder certificarme en las diferentes plataformas de Microsoft Excel, PowerPoint y Word. Además en Bases de Datos, Programación y Sistemas Operativos. Estas oportunidades que me dio Kinesis fueron las que dieron luz a mi mente para escoger mi futura profesión”, sostuvo.
“Todavía recuerdo aquella vez que solicité (admisión universitaria). Mi consejera me notificó que solo quedaban cinco horas para someter la misma. Fue una total odisea enviar todos los papeles. A fin de cuentas se logró enviar todo, porque esos eran los planes que Dios tenia para mi vida. Hogar de experiencias, aprendizaje e inclusive largas jornadas de ocho horas de estudio, además de mis horas escolares. Para mí eso no importaba, porque Kinesis me preparó con todas las herramientas posibles para así poder ir lo más preparado para la universidad. Ellos lograron ayudarme a “Unlock” mi potencial”, aseguró.
Añadió que como futuro ingeniero en computadoras aspira a ser parte de compañías expertas en el campo de la tecnología como Google, Microsoft y Dell y además, ayudar a otros jóvenes, pues le encanta regalar el don de la enseñanza.
“Joven que me estás leyendo, no existe una receta para el éxito, tu creas tu propia receta. Cada persona tiene un camino diferente que seguir para llegar al éxito. Ya tu haz sido exitoso hasta donde haz llegado y continúa así que el camino es largo y duro, pero en la medida que lo disfrutes y aprendas en el proceso es maravilloso. A mi me ha tocado vivir un camino duro con equivocaciones, procesos trabajosos y un muy arduo trabajo. Sin embargo, he salido airoso porque Kinesis siempre ha estado ahí, siempre me ha abierto las puertas. Estoy muy agradecido, principalmente por la bendición que Dios colocó en mi vida de ser parte de tan excelente fundación”, concluyó. [/vc_column_text][/vc_column][/vc_row][vc_row][vc_column][/vc_column][/vc_row]